El ADN «oscuro».

La tecnología de secuenciación de ADN ha permitido que los científicos desentrañen preguntas que los humanos han estado preguntándose acerca de los animales durante siglos. Al mapear los genomas animales, ahora tenemos una mejor idea de cómo la jirafa tiene su enorme cuello y por qué las serpientes son tan largas. La secuenciación del genoma nos permite comparar y contrastar el ADN de diferentes animales.

Esto al mismo tiempo nos permite comprender como hemos evolucionado. Sin embargo, nos enfrentamos a ciertos misterios. Parece que algunos genes no están en ciertos genomas de animales. Estos genes aparentemente faltantes han sido denominados como “ADN oscuro”. Y su existencia podría cambiar la forma en que pensamos la evolución. “Mis colegas y yo primero encontramos este fenómeno al secuenciar el genoma de la rata de arena (Psammomys obesus). Es una especie de gerbo que vive en los desiertos.

En particular, queríamos estudiar los genes del gerbo relacionados con la producción de insulina. Esto con el fin de entender por qué este animal es particularmente susceptible a la diabetes tipo 2”. Adam Hardgreaves. “Pero cuando buscamos un gen llamado Pdx1 que controla la secreción de insulina, descubrimos que faltaban otros 87 genes que la rodeaban. Algunos de estos genes faltantes, incluyendo Pdx1, son esenciales y sin ellos un animal no puede sobrevivir. Entonces, ¿dónde están? La primera pista fue que, en varios de los tejidos corporales de la rata del desierto, encontramos los productos químicos que crearían las instrucciones de los genes desaparecidos”.

Esto sólo sería posible si los genes estuvieran presentes en algún lugar del genoma. Esto indica que no estaban realmente desaparecidos, sino que estaban ocultos. Las secuencias de ADN de estos genes son muy ricas en moléculas G y C. Estas son dos de las cuatro moléculas ‘base’ que componen el ADN. Sabemos que las secuencias ricas en GC causan problemas para ciertas tecnologías de secuenciación de ADN.

Esto hace que sea más probable que los genes que estábamos buscando fueran difíciles de detectar, en lugar de estar desaparecidos. Por esta razón, bautizamos la secuencia oculta “ADN oscuro”. Es una forma de referirnos a la materia oscura, la materia que creemos que constituye aproximadamente el 25 por ciento del universo, pero que no podemos detectar.

Al estudiar el genoma de ratas del desierto, encontramos que una parte de la misma, tenía muchas más mutaciones que se encuentran en otros genomas de roedores. Todos los genes dentro de este hotspot de mutación ahora tienen ADN rico en GC. Han mutado a tal grado que son difíciles de detectar utilizando métodos estándar. La mutación excesiva a menudo impedirá que un gen funcione. Sin embargo, de alguna manera los genes de la rata del desierto logran cumplir con sus funciones.

Este tipo de ADN oscuro se ha encontrado previamente en aves. Los científicos han descubierto que 274 genes están “desaparecidos” de los genomas de aves actualmente secuenciados. Estos incluyen el gen de la leptina (una hormona que regula el equilibrio energético). Los científicos fueron incapaces de encontrar estos genes durante muchos años. Una vez más, estos genes tienen un contenido de GC muy alto. Sus productos se encuentran en los tejidos del cuerpo de las aves. Sin embargo, estos genes parecen estar ausentes de las secuencias del genoma.

La mayoría de las definiciones de los libros de texto de la evolución indican que se produce en dos etapas: la mutación seguida por la selección natural. La mutación del ADN es un proceso común y continuo, y ocurre completamente al azar. La selección natural actúa entonces para determinar si las mutaciones se mantienen y se transmiten o no, generalmente dependiendo de si resultan en un mayor éxito reproductivo.

En resumen, la mutación crea la variación en el ADN de un organismo. Sin embargo, es la selección natural la que decide si permanece o si se va. De esta forma se desvía la dirección de la evolución. Pero los hotspots de alta mutación dentro de un genoma, significan que los genes en ciertos lugares tienen una mayor probabilidad de mutación que otros. Esto significa que tales hotspots podrían ser un mecanismo subestimado que también podría influir en la dirección de la evolución.

Hasta ahora, el ADN oscuro parece estar presente en dos tipos de animales muy diversos y distintos. Pero aún no está claro lo generalizada que podría ser. ¿Podrían todos los genomas animales contener ADN oscuro? ¿qué hace que los gerbos y las aves sean tan únicos? El rompecabezas más emocionante que se va a resolver es determinar qué efecto ha tenido el ADN oscuro en la evolución animal.

En el ejemplo de la rata del desierto, el hotspot de mutación puede haber hecho posible la adaptación del animal a la vida en el desierto. Pero, por otro lado, la mutación puede haber ocurrido demasiado rápido. Tan rápido que la selección natural no ha sido capaz  de eliminar cualquier cosa perjudicial en el ADN. Si es cierto, esto significaría que las mutaciones perjudiciales podrían impedir que la rata de arena sobreviviera fuera de su actual ambiente desértico.

Facebook on Fire…

 

El fundador de Facebook Mark Zuckerberg. FOTO: REUTERS / EPV

Facebook se halla sumida en una tormenta política global por la fuga de datos de 50 millones de usuarios estadounidenses, supuestamente aprovechada por la consultora Cambridge Analytics para afinar con perfiles psicológicos las estrategias de atracción de voto de la campaña de Donald Trump en 2016. Políticos de EE UU y Reino Unido, donde Facebook es investigada por su posible papel en la campaña a favor del Brexit, han reclamado que Mark Zuckerberg dé explicaciones.

El escandalo se suma ahora a la trama Rusa por las interferencias en las elecciones presidenciales del 2016.

Tras saltar el sábado el escándalo por las revelaciones de The New York Times y The Observer, la senadora demócrata Amy Klobuchar ha exigido que Zuckerberg, el presidente de la mayor red social del mundo, testifique ante el Comité Judicial del Senado de Estados Unidos por la explotación de datos de sus usuarios para diseñar herramientas de “publicidad política” y de “manipulación de los votantes”.

Adam Schiff, principal representante demócrata en el Comité de Inteligencia del Congreso, se preguntó qué datos de los ciudadanos afectados llegó a conocer la consultora y propuso que se abra una investigación a fondo sobre el caso. El sábado, la fiscal general de Massachusetts, Maura Healey, anunció el inicio de la primera investigación formal.

Facebook niega en redondo su responsabilidad. Cambridge Analytica recopiló en 2014 la abundante información de manera indirecta a través de un investigador de la Universidad de Cambridge, el psicólogo rusoamericano Alexandr Kogan, que había recibido permiso de la red social para recabar datos de sus usuarios para fines académicos, pero no políticos. Facebook descubrió hace tres años el desvío de datos, pero hasta el viernes pasado no suspendió las cuentas de Cambridge Analytica y de Kogan y se comprometió a asegurarse de que la firma no siguiese conservando la información personal que acumuló, como identidades, localizaciones y los me gusta de los usuarios.

La empresa, fundada en EE UU por figuras clave en la campaña de Trump, como Steve Bannon o el mecenas Robert Mercer, pero de matriz británica, está siendo investigada en Reino Unido en el marco de la supuesta interferencia del espionaje ruso en la campaña a favor de la salida del país de la UE.

Un portavoz de la primera ministra británica, Theresa May, precisó este lunes que una agencia del Gobierno ha abierto una investigación sobre este escándalo de filtraciones con fines políticos, con ramas entrelazadas en Estados Unidos y Reino Unido, que calificó como “altamente preocupante”. El presidente del comité de asuntos digitales de la Cámara de los Comunes, Damian Collins, avanzó que llamará a declarar a Zuckerberg y al director de Cambridge Analytica, el británico Alexander Nix. “Alguien debe asumir la responsabilidad por esto. Es momento de que Zuckerberg deje de esconderse detrás de su página de Facebook”, añadió.

De su lado, la comisaria europea de Justicia, Vera Jourová, anunció que pedirá aclaraciones a Facebook al respecto. Jourová tenía previsto llegar ayer a Washington para abordar cuestiones de protección de datos con el secretario de Comercio estadounidense, Wilbur Ross. Aunque su agenda oficial no incluía en principio ninguna reunión relacionada con el uso fraudulento de la información de los usuarios, la cuestión sobrevolará sin duda la visita.

“Horrible si se confirma. ¡Los datos personales de 50 millones de usuarios de Facebook podrían haber sido mal gestionados y utilizados con fines políticos de una manera tan sencilla! No queremos esto en la UE”, criticó Jourová en un mensaje que escribió en su cuenta de Twitter.

La Comisión Europea, que esta misma semana presentará un impuesto digital que afectará entre otras empresas a la red social de Zuckerberg, insistió en que las compañías deben asumir la responsabilidad del correcto tratamiento de los datos personales.

Los representantes de Facebook también deberán responder a las preguntas de los eurodiputados. El Parlamento Europeo, la institución comunitaria con cariz más político, aseguró ayer que investigará el caso. “El uso indebido de datos de usuarios de Facebook es una violación inaceptable del derecho a la privacidad de los ciudadanos”, lamentó el presidente de la Eurocámara, Antonio Tajani.

Caída en Wall Street

Facebook se dio este lunes un batacazo en Bolsa tras destaparse el fin de semana del escándalo de la fuga de datos y cayó más de un 7% en la sesión de Wall Street. El desplome se explica por el miedo de los inversores a que Facebook pierda usuarios y a que los países más influyentes aprueben políticas más rigurosas para proteger la privacidad del consumidor. Ha sido su mayor caída desde 2012 y los analistas estiman que ha supuesto una pérdida de unos 32.000 millones de euros. El golpe a la red social que dirige Mark Zuckerberg causó un efecto en cadena de la actividad bursátil, con pérdidas de las grandes compañías tecnológicas como Amazon, Alphabet o Netflix.

Los sectores de la Bolsa de Nueva York marchaban todos en terreno negativo, con el de tecnología a la cabeza, con una bajada de 2,74%, seguido por la energía (1,84%) y las materias primas (1,72%).

El bienestar de lo pequeño.

La revista Temas No 89 90 dedica su nuevo número doble a “La pequeña escala como modelo de desarrollo” en momentos en que se espera un nuevo paquete de normativas y legislaciones para el trabajo privado en la Isla.

El próximo jueves, 29 de marzo 2018, el encuentro de debate y reflexión que promueve la propia revista Temas estará dedicado a conversar acerca de los grupos de altos ingresos en Cuba, sus dinámicas y características.

De ahí la importancia y la oportunidad de la nueva entrega de la revista. Su visión general e individual de la actual sociedad cubana, sus rasgos dinámicos dentro de una dialéctica de cambios políticos y económicos, pero sobre todo su impacto en la sociedad y sus individuos.

El esfuerzo intelectual de la revista Temas tiene por meta una dinámica multifactorial. No basta con la unificación monetaria y su impacto en la macroeconomía, si no el impacto sobre los trabajadores y las empresas estatales. O el emergente sector privado. Tiene que ver con la reforma al mercado del trabajo, los precios y por último los ingresos.

Tenemos por una parte la propuesta de la emprendedora empresa privada en Cuba, ya sea “cuentapropismo” o pequeña y mediana empresa; y los efectos en la distribución de los ingresos y la propiedad en Cuba que ella provoca. Según cifras internacionales dicho sector emplea más del 30% de la población económicamente activa y aporta entre un 7% y un 20% al Producto Interno Bruto.

Una dinámica de reforma económica y de paradigmas sociales y hasta culturales en Cuba en momentos en que por cuestiones temporales y/o biológicas la dirigencia histórica le da paso a una nueva generación.

En la presentación leemos:

Este número, armado por Rafael Betancourt y nuestro equipo editorial, analiza el rol de la pequeña escala (empresarial, territorial, privada, estatal, cooperativa) como sostén de dinámicas de desarrollo, en términos de eficiencia, crecimiento, innovación tecnológica, empleo, competitividad, resistencia ante crisis. Los casos reunidos aquí abarcan desde India y China, pasando por Rusia, Francia y el resto de Europa, hasta nuestra región, y sectores que van desde la agricultura a la bioteconología. Con esta entrega, Temas intenta contribuir modestamente al fomento de una cultura de la economía.

Por su parte en la presentación de la publicación Ricardo Torres brinda algunas pautas de la situación actual del debate sobre el tema.

Quiero terminar esta pequeña reflexión, muy improvisada sobre el tema, con una idea: muchas veces no es casual que en determinados debates, determinados contextos socioeconómicos, estas escalas pequeñas tengan un rol menor. Existe la idea, y por eso mencioné antes el caso de la nueva izquierda latinoamericana, de que hay un criterio de justicia social que tiene que ver con distribuir, centralizadamente, recursos para satisfacer necesidades de grupos poblacionales que pueden ser muy amplios. 

El “rol menor” del que escribe Torres lo conoce muy bien el consejo de redacción de Temas. Y finaliza y comienza con la distribución de la riqueza y la propiedad en las sociedades del siglo XXI.  La adaptabilidad al entorno global y complejo del mundo actual ya sea “empresarial, territorial, privado, estatal, cooperativo” proporciona la única posibilidad de “sostén de dinámicas de desarrollo, en términos de eficiencia, crecimiento, innovación tecnológica, empleo, competitividad, resistencia ante crisis”.

Tomemos como ejemplo un agregado macroeconómico: el salario.

El salario real del sector estatal en Cuba, como fuente fundamental de ingresos en una economía socialista, aun no se  recupera desde 1989. Señala el economista Cubano Carmelo Mesa Lago: “(…) el salario era un décimo del nivel de 1989; después con la recuperación aumenta consistentemente, pero todavía en 2016 era 39,3% del nivel de 1989, o sea, un 60,7% menor, esto quiere decir que el poder adquisitivo se contrajo en ese porcentaje. Si se observa el año 2010, usado como base por la CEPAL, el salario aumenta de 27,1% a 39,3% pero esta es una visión a corto plazo que no se conforma con una mirada a largo plazo (2). Cuba es el único país en América Latina donde el salario en el sector estatal (la enorme mayoría en el país) se fija centralmente; la ley no estipula su ajuste al IPC y concede gran discrecionalidad al gobierno para hacerlo. El salario medio estatal mensual de 687 CUP en 2015, equivalía a 27 dólares, insuficiente para cubrir las necesidades básicas (excluyendo educación y salud), mientras que el salario mínimo de 225 CUP era una cuarta parte del ingreso necesario para cubrir necesidades básicas”.  

“Qué pasa con las leyes?

Al final la cuestión del equilibrio y la dinamica de lo “pequeño” con lo “grande” concluye en y con el individuo.

Esa cultura individual y de la sociedad civil como parte decisiva en el actual debate sobre políticas y por supuesto el reordenamiento de toda la sociedad cubana. No por casualidad (imagino) el equipo editorial de Temas incluye en el mismo número una interesante sección con una serie de preguntas: ¿Qué peso tiene la legislación en la Actualización del modelo? ¿En qué medida es fundamental en el proceso de implementación de los cambios? ¿Cuáles son los problemas de la instrumentación normativa de las políticas? ¿Cuáles afectan el área específica de la producción de normas? ¿Cómo explicar que la legislación aparezca retrasada respecto a las políticas enunciadas hace un lustro?

Me parece la mejor sección del ejemplar.

La nueva legislatura y el nuevo gobierno tendrá que priorizar un debate sobre políticas no solo monetarias o tributarias sino laborales y de acceso a la propiedad privada de los medios de producción,  o el acceso a los mercados internacioneales de capitales o bienes, o a las comunicaciones y los flujos globales de saberes y bienes, pero sobre todo debe llegar a un consenso para aplicarlas oportuna y en las mejores condiciones para que sean operativas y oportunas.

Al final el bienestar y la durabilidad de los proyectos sociales se definen por el bienestar de lo pequeño: las personas.

33 Revoluciones…por minuto.

Hay ciertos libros, como algunos amores y amistades, que nos persiguen toda una vida.

Al día siguiente de los atentados de París, un hombre se presentó con un piano delante de la sala de conciertos Bataclán e interpretó «Imagine». Aquello provocó dos tipos de respuesta: los que sintieron una profunda emoción y, quienes, como pudo incluso leerse en algún artículo en la prensa española, detestaron aquella demostración de debilidad frente a la amenaza yihadista. Tal es la capacidad para provocar reacciones encontradas que todavía posee una composición escrita hace 44 años. La letra es bastante insulsa, la melodía es simple, y además Lennon era un tipo de trato bastante desagradable. «La cosa es que no tenía humildad. Lo interesante de muchos cantautores protesta es que tienen conciencia de lo que no saben y cierto interés en gente que no sean ellos mismos. Mientras que Lennon estaba tan atormentado que siempre escribía sobre sí mismo, salvo en un par de excepciones. Incluso sus canciones políticas eran muy personales. Como «Imagine». Es un gran logro, porque encontró el camino para ser político y personal a la vez.

Este análisis lo realiza Dorian Lynskey, autor del magnífico libro «33 Revoluciones por minuto» un texto de casi mil páginas sobre un género hoy en desuso como es la canción protesta. En él realiza un pormenorizado recorrido por los artistas y las circunstancias históricas que provocaron la reacción de esos músicos. Pero las protagonistas son las canciones: cómo surgieron, por qué, en qué momento y cuál fue su impacto, todo ello además desde el punto de vista de un profesional de la crítica musical. «A veces grandes canciones protesta sofisticadas e inteligentes no tienen mucho éxito, y otras muy obvias sí triunfan porque la gente necesitaba esa canción en ese momento determinado».

Algo así ocurrió con «Eve of Destruction», cuyo autor, P. F. Sloan: «Tenía 19 años cuando la escribió en una noche en blanco en la que estaba muy enfadado con el mundo, y de algún modo resume el estado de ánimo de los sesenta. «Eve» es hasta un poco torpe, se nota que la persona que la escribió no sabía demasiado de política. Ni siquiera el tío que la cantaba, Barry McGuire, estaba muy comprometido con el mensaje. Gentes como Dylan estaban horrorizados pensando en cómo esta canción adolescente conseguía tal éxito masivo. Pues porque la gente se sentía identificada con el mensaje, y se preguntaban hacia dónde va el mundo.

Es una de las maneras extrañas que tiene el pop de funcionar: toda tu carrera queda definida por algo que quizá solo te llevó un par de horas hacer».

*

El viaje contenido en «33 rpm…» comienza en 1939, con Billie Holyday interpretando «Strange Fruit», y con la reacción de incredulidad del público ante la detonación de esta bomba en forma de blues contra la segregación racial. Fue escrita por Abel Meeropol, que se inspiró en la fotografía de dos negros linchados y ahorcados en Indiana. El asunto no daba para la clásica canción coreada por cientos de personas reunidas por una causa. Más bien para un susurro desgarrado, ideal para aquella mujer de aspecto frágil y desamparado, que, como su voz, siempre parecía a punto de romperse. Antes había habido canciones sindicales, antibélicas, himnos religiosos… Pero siempre para ser coreados, no para que un intérprete se las apropiara. A partir de ahí por sus páginas desfilan cientos de nombres, desde los más obvios como Woody Guthrie, Pete Seeger, Bob Dylan, Gil-Scott Heron, Marvin Gaye, Neil Young, The Clash, REM, Public Enemy, Radiohead, Rage Against The Machine… incluso U2 y las megacampañas musicales para recaudar dinero con destino a África. De fuera de Estados Unidos y el Reino Unido, apenas Víctor Jara, Fela Kuti y Bob Marley, y los artistas jamaicanos merecen algún capítulo, aparte de referencias a bandas como la rusa Pussy Riot. Y eso que su autor planeaba «escribir desde el punto de vista de diferentes países: Kenia, Ucrania, Israel… Y sobre todo en el presente. Pero no pude vender esa idea, me dijeron que no tendría suficientes lectores».

Una cosa queda clara: todos los géneros, hasta los más improbables, han servido para encauzar el malestar: el folk, el jazz, el funk, el punk, el hip hop, la electrónica… Incluso la música disco («I was born this way», de Carl Bean, contiene la expresión Yes, I’m gay…

Yo no lo soy pero sí lo son los motivos para la rebeldía: la segregación racial, las condiciones laborales, la guerra de Vietnam, Nixon, Thatcher, la degradación de los barrios negros, el feminismo, las reivindicaciones de tipo sexual… Hasta llegar a la antiglobalización y la guerra de Irak. Sin embargo, el libro termina dando el asunto por prácticamente finiquitado: «Espero que os llegara la última versión…». Pues no. «Verás, la primera era más pesimista porque la iba editando en orden cronológico y, cuando llegas a los noventa, parece evidente la decadencia. Se siguen escribiendo canciones protesta, pero no son tan excitantes y poderosas. No se puede comparar con codearse con Luther King o hacer campaña por Mandela. En la segunda edición cambié algo mi conclusión: todavía hay gente enfrentándose a la política, todavía son importantes, aunque no habrá otros Dylan o The Clash. Nadie se va a convertir en una gran estrella multimillonaria haciendo esto».